TIERRAS
DE ESPAÑA
Tomás
Rueda es un librillo de la colección Austral que reimprimía un ensayo novelesco de Azorín (1873/1967)
sobre el Licenciado Vidriera (publicado primero en 1915 en La Vanguardia) sobre el que
Rita R. Rodríguez ha escrito un muy interesante estudio [i] .
Sin embargo, no glosaré la
huella cervantina comentada por nuestra estudiosa; me fijaré en la página y
media del libro que Azorín titula Tierras
de España. Cuando Tomás Rueda llega
a Cartagena, multitud de banderas ondean al viento y el autor añade que los soldados
acaban de llegar y “Tomás va a embarcar
con ellos hacia Italia”.
Al poco, el barco levantará
anclas, saldrá del puerto y “desde allá lejos Tomás columbrará la tierra de España, que se
desvanece en el agua y en el cielo. ¡La tierra de España! ¡Las naciones de
España”.
Y entonces el pausado Azorín reflexiona
sobre pasados y presentes y comenta que Baltasar Gracián --en el opúsculo El político Don Fernando—ha señalado las
diferencias que para gobernar existen entre
Francia y España, siendo la principal que en nuestros vecinos todo concurre para que la gobernanza resulte
fácil, mientras acá la cosa difiere. Gracián reflexiona: ”Pero
en la monarquía de España, donde las provincias son muchas; las naciones,
diferentes; las lenguas, varias; las inclinaciones, opuestas; los climas, encontrados; así como es menester
gran capacidad para conservar, así mucha para unir”.
Y en un día como el de la fecha
quedo también pensativo y preguntándome, ¿por qué olvidamos los avisos de nuestros clásicos?
¿No percibimos que no saber y menos
pensar hacia buen fin conduce a
improvisaciones ominosas?
[i] Rita R.
Rodríguez, Universidad de Vigo, Cervantes en Tomás Rueda , Actas VIII, Actas Cervantistas . Este estudio se
puede leer en Google.